Comentarios estúpidos al cumplir dieciocho.
Todos pintan los dieciocho años como si fuera lo mejor que te puede pasar en la vida, eres legal, puedes salir de fiesta, tomar alcohol, tener un noviazgo, etcétera. Pero, ¿por qué nadie habla de los comentarios estúpidos qué tendremos que soportar?
No me presiones, no me preguntes una y otra vez cuando comenzaré a trabajar, no cuestiones la carrera profesional que he decidido estudiar, no critiques las forma en que escribo mi firma, no formes miedos en mi sobre cosas que aún no he experimentado porque sé que aquí comienza la presión social:
¿Cuándo comenzarás la universidad?, ¿cuándo terminarás la universidad?, ¿cuándo te conseguirás un trabajo?, ¿cuándo tendrás una pareja?, ¿cuándo se casarán?, ¿cuándo tendrán hijos?, ¿cuándo tendrán otro hijo?, basta, no necesito que me mortifiques y presiones, viviré mi vida, a mi ritmo, no al tuyo.
Permiteme equivocarme y ser yo misma quién descubra lo que está por venir.
Valeria Almaraz ©