Enamórense.

Joder, enamórense, enamórense y hagan que valga la pena estarlo o haberlo estado. Y no sólo se enamoren de su físico, enamórense de su deslumbrante sonrisa, de su preciosa risa, de su exótica voz, de sus lindos ojos, de los lunares y cicatrices que adornan su piel, de sus líneas de expresión, de sus locuras, de la felicidad que derrocha al cantar su canción favorita, de sus anécdotas, de su particular forma de vestir, de sus momentos de ternura y perversidad, de sus inexplicables cambios de humor, de todos aquellos pequeños detalles que pocas personas se detienen a conocer.

Qué nadie los desanime a experimentar éste bello sentimiento que por mucho, es el mejor de todos. No se pongan excusas, quieran a esa persona estando a centímetros o miles de kilómetros de distancia porque cuando el amor es verdadero, sobran las razones para luchar contra lo que los separa.

Enamórense aún cuando tengan miedo a estarlo y volver a fracasar, aún cuando las personas dicen que no deberían estar juntos, aún cuando tienen creencias distintas, aún cuando sus gustos no sean los mismos, aún cuando no es correspondido o parezca imposible, den todo de ustedes, dejen fluir el sentimiento.

Experimenten aquello de querer hablar de esa persona en todo momento, sonreír de la nada cuando te llega un recuerdo, qué se forme una sonrisa en tu rostro al recibir un mensaje suyo, morir de amor al ver una fotografía suya, disfrutar sus audios, así como desear escuchar su voz todo el tiempo, agradecer porque esa persona entró en tu vida, llegar a quererse mutuamente e intercambiar mensajes largos haciéndose saber lo mucho se quieren, hacer planes a futuro juntos, escribirle cartas y poesía, dedicarle canciones.

Se los dice quién ha querido, deseado, soñado a la misma persona durante meses y no se ha cansado ni un segundo de quererle con cada latido de su corazón.

No hay nada más lindo que estar enamorado, lo juro. Es cierto que es mucho más lindo cuando el enamoramiento es mutuo, pero aún cuando no es así, tenemos que disfrutarlo y no privarnos a sentirlo, vivirlo e experimentarlo.

Si hay algo que quiero hacer el resto de mi vida, es estar enamorada.